Necesitamos una escuela
que no existe
Según los datos publicados en el "IV Barómetro Juvenil 2023. Salud y bienestar" realizado por la Fundación Mutua Madrileña y Fad Juventud, el 59,3% de los jóvenes españoles de entre 15 y 29 años reconoce padecer problemas de salud mental.
Esto impide que muchos jóvenes puedan terminar sus estudios, pero tampoco el sistema educativo ofrece otras vías de formación o salida profesional a estos alumnos, que tienen que seguir en la educación obligatoria pese a su deterioro creciente.
Los profesores se encuentran en las aulas lidiando con alumnos pasivos, desconectados del "para qué" de lo que hacen, y teniendo que sacar adelante programaciones de contenidos inabarcables.
Por eso, queremos ofrecer a alumnos de estas características una atención y respuesta hecha a la medida de sus necesidades. No podemos ni queremos seguir dando por bueno un modelo educativo que impide el desarrollo integral, libre, responsable y conectado de cada alumno.
En Aprendemos Todos creemos que aprender produce altas cotas de felicidad siempre que este aprendizaje responda a nuestras preguntas internas, a nuestros intereses únicos y singulares.
Por eso, estamos gestando una nueva escuela, una escuela que no existe; una escuela cuya palabra es vocación.
Sí, ¡vocación!
Dicha palabra habla de:
Llamada
Inspiración
Voluntad.
Compromiso
Emoción.
Atención.
Sentido.
Entusiasmo.
¡Verdad!
¡Necesitamos esta escuela de vocación!
Aprender es una de las experiencias que aportan más felicidad, si podemos elegir aquello que aprendemos; si lo que aprendemos responde a nuestras preguntas internas.
Una escuela para adolescentes y jóvenes que buscan su vocación y sitio en el mundo tras acabar la educación obligatoria.
Nuestra Escuela de Vocación quiere ser una alternativa de calidad frente al vacío de ofertas alternativas a la educación obligatoria.
Los padres quieren buscar para su hijo un entorno humano y profesional, que le ayude a re-orientarse y hacerlo acompañado de profesionales que conocen bien estas crisis y cómo salir de ellas.
Hay muchos alumnos que acaban con enormes dificultades la secundaria y lo hacen sin ninguna claridad sobre cómo seguir su formación futura. Las opciones se limitan a iniciar un bachillerato sin la claridad y estabilidad emocional que se requiere para sacarlo adelante, u optar por una formación profesional que, pese al aumento y calidad de sus ofertas, tampoco le ofrece lo que necesita.
También hay alumnos que pese a 2º de Bachillerato sin problemas se encuentran con incertidumbres parecidas, sin saber qué hacer.
Estamos necesitados de modelos de educación alternativos al actual. Llevamos muchos años hablando de este cambio pero la educación en las aulas sigue siendo la misma: grupos uniformes, metas iguales para todos los alumnos, asignaturas compartimentadas, dinámicas de aprendizaje obsoletas, exámenes y exámenes, escasas propuestas de creatividad y exploración personal, etc.
Es hora de romper estos dolorosos límites en el acercamiento al conocimiento, porque no hay camino menor o despreciable en la formación profesional de cualquier alumno, siempre que dicho camino esté conectado a su corazón, voluntad y su desarrollo pleno.
Por ello esta escuela de vocación ofrece a sus alumnos la posibilidad de descubrirse, descubrir su vocación personal y profesional y compartir sus hallazgos en una comunidad que crea nuevas ofertas para la sociedad.
Todas nuestras actividades activan recursos y talentos que no se han podido mostrar o ver por diferentes motivos en la vida escolar, y que han dejado al alumno sumergido en una apatía o desconexión de la que le ayudamos a salir. Acompañamos un proceso de reconstrucción interna imprescindible para emprender unos estudios o meta profesional que le aporten satisfacción y disfrute.
